Review: “Scott Pilgrim VS The World” (2010)

OJO: SPOILERS MAYORES A LA VISTA.

La adaptación de un cómic siempre es complicada, se deben tomar decisiones respecto a que elementos dejar afuera y cuales incorporar a la historia. Siempre existen cambios significativos, y ciertos giros argumentales importantes que no dejarán a todos los fanáticos conformes. Lo importante de una adaptación es sacarle provecho a todos aquellos elementos y factores que por la naturaleza del comic no se podían expresar de mejor manera, un punto donde el Cine ha evolucionado incluso al 3D.

Y ese es el gran mérito de la cinta de Edward Wright, a diferencia de lo que pasó con la insulsa e infantil adaptación de “Kick-Ass”, cuya gran virtud presente en sus anteriores trabajos (la notable “Hot-Fuzz” por ejemplo) es el pulido trabajo de edición que realiza y la correcta utilización de los efectos especiales como herramienta de apoyo a la historia y no como foco de la trama.

En fin, debo reconocerme inicialmente como un mega fanático de la saga de Scott Pilgrim, el joven canadiense y sus desventuras amorosas. Me leí en un par de días los 5 primeros tomos de su historia, y esperé ansioso la publicación de “Finest Hour” el 6to y última entrega de la saga, pese al sin sabor de boca que me dejó el desenlace (así como acaba un producto con el cual te identificas) valoro enormemente el relato generacional que hace su autor, Brian Lee O’Malley, hacia la sociedad actual, un relato donde se relata entre otras cosas los intereses y encuentros de una generación marcada por la sobrevalorada cultura pop y por las relaciones “express”, pero se aleja de aquel estereotipo de juventud escasamente pensante y facilista que se insiste en entregar por los medios hoy día.

Scott Pilgrim es un joven en sus 23 años, cesante, que vive con su amigo gay en un apartamento escasamente amoblado. El comic navega en las aventuras cotidianas de Scott, su banda de garage compuesta por sus amigos del barrio, nada del otro mundo, excepto en el hecho de que nuestro protagonista conoce a la eternamente enigmática Ramona Flowers, y a la “Liga de los ExNovios” que trae consigo, debe derrotar a los 7 ex novios malvados para conquistar el corazón de una chica que levanta más preguntas que respuestas. Éste es el hilo de la historia, muy muy resumido, pero lo peculiar del cómic va más allá, mientras la historia principal se desarrolla y se entremezcla con lo que evoluciona de la situación personal de los diferentes personajes, sus relaciones, sus pasados, etc. Y es que, la peculiaridad del cómic es que introduce todo tipo de conceptos fantásticos, en muchos casos tremendamente influídos por los videojuegos y los cómics, sin prácticamente explicación, simplemente asumiendo que están ahí.

Por ejemplo, tenemos las subspace highways ("autopistas del subespacio"... o algo así se traduciría, caminos que se pueden coger para llegar más rápido de un sitio a otro y que muchas veces pasan por los sueños de algunas personas: así es como Scott conoce a Ramona, pues ella las usa para ahorrar tiempo en sus rutas de reparto de paquetes para Amazon.ca, y una de las rutas pasa por los sueños de Scott), las peleas entre personajes, que incluso terminan con uno de los contendientes muerto y dejando un item, dinero o hasta vidas extra detrás (éstas se nos introducen al final del primer tomo como si fueran lo más normal), los puntos de experiencia, los poderes psíquicos que tienen algunos veganos (¿). Pero no nos quedemos con la lectura “por arriba”.

Porque en realidad Scott Pilgrim no es un cómic de fantasía (aunque es un cómic fantástico). Es bonito y es gracioso pero también hay una corriente de tristeza y angustia e incerteza y maravilla, todo lo que puede esperarse en una historia cualquiera de un tipo cualquiera que va creciendo y ve enfrentados sus sueños y esperanzas a los sueños y esperanzas de los demás. Todo eso de “lo que quieres hacer con tu vida” versus “lo que tu vida quiere hacer contigo”, el dónde encajas, el quiénes son tus amigos, el toma y daca de las relaciones, los sacrificios que se hacen, las heridas, los peligros, las ganancias… Dudo que haya mucho de autobiografía en este cómic, pero aún despojándolo de las improbabilidades y los estereotipos y los clichés románticos televisivos, puede sentirse una evolución en el protagonista (sobretodo en él y en su mejor amiga, Kim Pine, probablemente la más cuerda y madura de todo el ensamble), un verdadero crecimiento.

El 6to tomo del comic ahonda en la problemática nostálgica del protagonista, su pesar es más profundo que nunca así como la densidad de su conflicto interior, extrañamente nos damos cuenta que Scott no es aquel chico cool que se nos presentaba ser, es cobarde y muchas veces un desgraciado superficial, aún así lo queremos ver triunfar. A Pilgrim siempre lo queremos ver triunfar, crecer.

Pero volvamos a la película.

El gran atributo de la película es saber mezclar el elemento “arcade” de los videojuegos con efectos especiales correctamente efectuados, el director entiende que su desafío era hacer una propuesta visual atractiva y dinámica por sobre un guión cuyos diálogos (así como los del comic) no podían sostenerse por si solos. Es cierto, existen giros argumentales importantes (por ejemplo la breve y pobre explicación al dispositivo con el cuál Graves controlaba a Ramona) y muchas de las peleas cambian en relación al comic, sin embargo se tomaron estas opciones en función de la puesta en escena, lo cual dio gran resultado, el combate de bandas contra los hermanos asiáticos es espectacular, así como el homenaje a “Seinfeld” en pleno filme. Resulta muy revitalizador la introducción de Knives Chau como personaje fundamental en el desenlace de la obra, siendo el nuevo final (distinto al del comic) mucho más acorde al tenor de la historia trazada durante 5 tomos anteriores.

Que Wright se haya encargado de la adaptación fue un gran acierto, se llevó a cabo un tributo mucho muy decente de “Scott Pilgrim”, quizás uno de los mejores relatos generacionales de nuestra época. Que Michael Cera encarnara al protagonista levantó ciertos temores en relación a su habitual caracterización de joven alternativo y perdedor, la sorpresa es mayor al verlo representar escenas de acción y darle un tono menos patético incluso que el “Scott Pilgrim” del comic. Para que hablar del casting total del filme, escogido con pinzas y muy pertinente, especiales referencias a Ramona Flowers y Julie, calzan a la perfección.

Calif: 8/10 LeagueofEvilExes.

SALUDOS