10 de septiembre de 2009

Review: Bruno (2009)

Voy a intentar hacerla cortita.... vaya que hay que tener estomago para ver esta cinta.

No intento repetir nuevamente mi eterno dilema de "la comedia hoy en día", ni lo sobrevalorado que se encuentra el humor absurdo gringo en la actualidad.

Hablo más bien de lo obvio, de la sobredosis de lo exagerado, del desfile de imágenes sin sentido que se presentan en Bruno (2009).
Todo esto personificado en Sacha Baron Cohen. Uff... que más se puede decir a esta altura de este artista, actor, personaje, comediante, lo que sea. El creador de "Ali G" y de "Borat" aquí se las manda de nuevo. Pero con cuatica.

Bruno es un supermodelo australiano, la Segunda Persona más famosa de la historia de Austria (la primera persona, ya saben, el caballero del bigotito). Homosexual a gritos, amante de un enano vietnamita, conductor de un programa de modas en Europa y muchas otras cosas.

Entendamos entonces que esto que vemos en pantalla no es un cine normal, es un cine creado a la fuerza bailando sobre los límites de la decencia, ha sido intencionadamente creado así
para sobrepasar obscenamente el límite de lo socialmente correcto, importándole un mojón cualquier creencia, religión y condición sexual, incluida la propia homosexualidad que identifica al protagonista de esta locura sin pies ni cabeza.Que quede claro, si no pudiste con "Borat", ni asomes tus narices en esta ocasión. Más aún cuando un pene bailarín ocupa toda la pantalla gigante!. jejeje. El humor de Cohen juega en el docureallity, o sea hace que el personaje de la pelicula traspase la ficción y lidie con situaciones de la vida real. Lamentablemente, a diferencia de su anterior cinta, esto ya no es suficiente, los eventos se ven forzados, algunos maquetados, y hay muchos que simplemente no funcionan. Pero donde más cojea la cinta es en la caracterización de Bruno, no logramos encariñarnos ni prestarle suficiente atención a este ambiguo personaje. La formula ya usada anteriormente en este caso resulta exagerada y repetitiva, sin opacar en ningun momento la gran calidad de interpretación de Sacha. Bruno carece de "ángel" de aquello que nos parecía tan ridiculo pero jocoso en sus personajes anteriores. A esta altura no existen puntos medios entre seguidores o detractores de Sacha Baron Cohen. Planificada de otra forma, con ideas más afiladas y objetivos más definidos, ‘Brüno’ podría haber sido no sólo una acertada continuación de ‘Borat’, sino también una gran burla hacia la sociedad “moderna”, obsesionada por la fama y el culto al cuerpo, y no sólo un escupitajo en pleno rostro a todos los cartuchos que aún atacan la homosexualidad y se escandalizan ante ella, que es en lo que se queda finalmente este amago de película (por cierto, ¿en qué se han gastado los 30 millones del presupuesto?). En resumen, y en pocas palabras, que Brüno es gay, muy gay, alocadamente gaaaaaaaaay… (Tal como dice Snoop Dog al final de la cinta) Vale, ¿y qué?

Calif: 4/10 Penes Bailarines Awards

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Pura locura de Mr. West